Fernando Benítez (1912- 2000), — fue un periodista, antropólogo, escritor, editor, historiador y un distinguido profesor de la Facultad de Ciencias Políticas en donde uno de sus auditorios lleva su nombre—, su obra ha sido poco estudiada en este siglo XXI. Benítez es considerado el “padre del periodismo cultural” en México. Dedicó su vida a esta profesión a partir de los 22 años. Comenzó su labor en Revista de Revistas (1934), donde trabajó dos años; después fue reportero en el periódico El Nacional (1936) y se ocupó de la dirección de este en 1947. Fue director y fundador de los suplementos culturales Revista Mexicana de Cultura (1947), México en la Cultura, en el diario Novedades (1949-1961); La Cultura en México, ¡en la revista Siempre! (1962); Sábado, del Unomásuno (1977), y La Jornada Semanal, de La Jornada (1987). En el campo ensayístico escribió La ruta de Hernán Cortés (1950), La vida criolla en el siglo XVI (1953), Viaje a la Tarahumara (1960), La ruta de la libertad (1960), Lázaro Cárdenas y la Revolución Mexicana (1977), Los primeros mexicanos (1982), Historia de la Ciudad de México (1982), Los demonios en el convento. Sexo y religión en la Nueva España (1985), La nao de China (1989), y como escritor de ficción: El rey viejo (1959) y El agua envenenada (1961). Del periodismo, la antropología y la literatura debido a su vasta labor en la cultura, tarea que emprendió desde una posición marcadamente nacionalista y no ajena a los problemas sociales que enfrentaba el país.